Escrito originalmente en 1999. Espero les resulte útil la reflexión.
Capital cultural
I. Aproximación a conceptos de cultura
Para referirnos a Capital Cultural, debemos dirigirnos hacia cultura, ¿qué es y qué abarca esta palabra?
Desde el punto de vista etimológico, esta palabra viene del latín ”kultur” que significa “cultivo, labor y beneficio de la tierra”, así que metafóricamente significa “cultivo del espíritu”, “resultado o efecto de cultivar los conocimientos humanos y de afinarse por medio del ejercicio de las facultades intelectuales del hombre”.
El estudio de la cultura es relativamente nuevo, pero esto no quiere decir que sea una invención reciente. La cultura ha existido desde tiempos muy remotos, cuando apenas nuestros antepasados estaban construyendo herramientas o buscando un código convencional de comunicación. La cultura surge como respuesta a la necesidad o el afán del ser humano para hallarle sentido a la vida.
Una de las primera concepciones acerca de la cultura surgió en Grecia Antigua, conocida como la Paideia Griega: adiestramiento intelectual y estético. Y de allí, a través de los siglos, ha venido evolucionando, adquiriendo diferentes significados dependiendo a la época y al contexto en el que se la utilice, por lo tanto, Cultura es una palabra multidiscursiva y no se le podrá encasillar en un solo significado.
En la actualidad, el concepto más aceptado de esta palabra surge durante la modernidad, en Voltaire y Vauvernargues, que la conciben como “los elementos culturales asequibles por medio de la educación, los buenos modales, Bellas Artes y las ciencias”, más tarde a este concepto, Herder en el Siglo XVIII, le añade el “aspecto técnico”.
Klem, Tylor y más tarde Wissler complementan la anterior concepción “integrando bases materiales y tecnológicas de una sociedad”, luego, debido a la postmodernidad, la cultura ya no será más un concepto concerniente solamente a lo aristocrático que era lo que había predominado desde Grecia, sino que ahora se le suma lo no refinado, es decir, lo popular sin diferenciar clase, género y raza.
Esto sólo ha intentando ser una mera aproximación a grandes rasgos de lo implica el término cultura y su evolución.
II. Capital cultural
La Cultura y por ende, el Capital Cultural, siempre ha sido la supremacía de la élite y el discruso perfecto para dominar a las otras clases (sean esclavos, obreros, parte de los burgueses, etc.), que en respuesta, estás han creado su propia cultura, estableciendo así, subculturas y contraculturas.
Para efectos de esta teorización, sólo me centraré en Capital Cultural y su concepción como tal. Pierre Bourdieu fue el primero en hablar acerc de este, militante en la corriente europea (surgió en Inglaterra) llamada Estudios Culturales, expresaba en su obra “la distribución desigual de las prácticas , los valores y las habilidades culturales” y que la clave de esta situación se encontraba en la educación.
Bourdieu hacía énfasis en algo importante: El acceso al Capital Cultural (conjunto de bienes simbólicos), por medio de la educación, depende principalmente del capital económico y como la distribución de las riquezas es desigual, la distribución del Capital Cultural también lo es, entre todas las clases.
Esto nos muestra la intrínseca relación de la cultura con el poder: Todo aquel que tiene cultura, tiene el poder y con el poder se adquiere más cultura. Por lo tanto, el acceso a los bienes simbólicos sólo es privilegio de quien tenga el dinero suficiente para pagarlo; y es lo que actualmente estamos viviendo, no sólo en nuestro país, sino en cualquier parte del mundo.
El juego del Poder es peligroso porque justifica las desigualdades sociales. Como lo decía al principio, en respuesta a la cultura de la élite, las otras clases crean su propia Cultura (subculturas y contraculturas), pero esto represente un enorme peligro para la élite , así que buscan, a través de su poder, re-crear un nuevo discurso que integre a ese discurso de las masas y quitarle su poder liberador, para convertirlo en sólo vanas ilusiones y todo vuelve a seguir como antes, cultura – poder.
El poder utiliza una herramienta super importante para este proceso, y son los mass media o medios masivos de comunicación, que son los encargados de velar por el orden establecido.
III. Las clases sociales y la distribución del capital cultural en ellas
En el anterior ítem nombré a las Clases Sociales, pero ¿qué son?, ¿qué es lo que las diferencia entre una y otra?, ¿cuál es su capacidad económica que le permite el acceso al capital cultural?
Siempre se han distinguido dos clases sociales:
* Clase Alta: Es aquella que siempre ha llevado las riendas del poder, sin importar en que sistema se esté: capitalismo, feudalismo, etc. La conforman la aristocracia o la élite. Actualmente son los gobernantes, reyes, magnates industriales (petróleo, oro, esmeraldas, narcotráfico, etc.) quienes tiene un gran poderío económico lo que les permite el acceso total, sin ningún tipo de restricción a los bienes simbólicos.
Los bienes simbólicos para esta clase, son de alta exclusividad, especialmente concebidos por las industrias culturales para este tipo de consumidores, dignos de pagar cualquier tipo de suma por ellos.
Como bienes simbólicos para esta clase encontramos los más refinados, como la ópera, el teatro, los conciertos exclusivos, museos como el Louvre o Del Prado, exposiciones de obras de pintores de renombre, televisión digital, acceso a internet, las mejores universidades (Harvard, Yale, Berkely, Oxford), lanzamiento de libros, etc.
* Clase Baja: Es la que siempre “lleva del bulto”. Es la clase encargada de mantener el status de vida de la clase alta. Antes eran los esclavos y los siervos, ahora son los obreros que laboran en grandes fábricas por salarios paupérrimos. Su acceso al capital cultural de la clase alta es nulo, sin embargo ellos tienen acceso, según sus recursos económicos, a unos bienes simbólicos tales como fiestas populares, televisión nacional, universidades estatales, teatro callejero, emisoras de radio populares (en Barranquilla por ejemplo como Jairo Paba en Rumba Estéreo y La Vallenata), libros que venden en las calles de segunda o paquitos.
La clase baja está siempre condenada a permanecer en su estrato, nunca podrá, siquiera a aspirar a tener acceso a otro tipo de comodidades.
Pero entre la Clase Alta y a Clase baja, existe una capa que se le conoce como la clase media, que en si no es una clase totalmente definida.
La capa media, es aquella que siempre lucha por no bajar pero que con esfuerzo logra mantener su status tratando de llegar a la alta.
Es una clase que puede permitirse ciertos accesos a bienes simbólicos pero con varios tipos de restricciones. La industria cultural los provee de televisión por cable, estaciones de radio un poco más cultas, una buena universidad, comprar buenos libros, una que otra salida a un museo, entre otras.
El status económico de esta capa es promedio y son aquellos que conocemos como los burgueses. Aquí encontramos pequeños y medianos industriales y comerciantes.
Analizando lo anterior, cabría la pregunta, Cómo el capital cultural ayuda a mantener las clases sociales establecidas?. El capital cultural, además del dinero, también clasifica a la sociedad, y por eso, como decía al principio, es un excelente discurso de dominación para las clases incultas. Pero el capital cultural no se transporta por si sólo, necesita de herramientas para propagarse, necesita de las industrias culturales, que hasta un punto ellas son las creadoras de cierto bienes simbólicos como la televisión digital, televisión por cable, la radio para todo tipo de clases, etc.
IV. Los medios de comunicación
Los medios de comunicación son las industrias culturales de las que he venido hablando en este ensayo, son las encargadas de distribuir, dependiendo a la clase social, ese conjunto de bienes simbólicos. Cada año reportan millones de dólares en ganancias.
Los medios de comunicación son reconocidos como un poder, y por lo tanto, al ser un poder, están también al servicio del poder y al igual que el capital económico, también los bienes culturales que estos distribuyen son excluyentes.
Tomemos el ejemplo de Barranquilla para no irnos muy lejos, tenemos la radio cuyas estaciones transmiten para las diferentes clases, Uninorte Stereo para la más refinada, después Radio Tiempo y Corazón Stereo hasta llegar a Rumba Stereo con la Vallenata para las clases populares.
La televisión nacional y regional es para la clase baja y el estrato medio, porque la clase alta cuenta con la televisión digital, parabólicas o por lo menos con la televisión por cable y lógicamente, los contenidos que se transmiten en una y en la otro son diferentes.
Internet es tal vez ahora mismo, el medio de comunicación mas excluyente, porque a el sólo tiene acceso la clase alta, algunos del estrato medio y muy pocos, de la clase baja, sólo aquellos que estudien en universidades estatales donden tengan un remedo de este servicio.
Con la prensa y el cine pasa lo mismo. El Tiempo, El Espectador son para las clases altas, El Heraldo para el estrato medio y bajo y La Libertad para un estrato bajo y cada periódico trata la noticia de forma diferente, desde lo más objetivo posible hasta el amarillismo y el sensacionalismo.
Las salas de Cine varían de acuerdo a las clases también. La alta tiene a Villa Country, Capri, Cinerama 84, los estratos medios pueden permitirse el lujo de vez en cuando ir a un cine de la clase alta, pero casi siempre recurre al Metro o a los ABC y la clase baja, va a los Cinemas o los cines de los centro comerciales como Metrocentro, Aladino, entre otros o el último reducto, que son los cines pornográficos.
Los medios de comunicación distribuyen estos mensajes, como ya lo había dicho, para cada clase social específica, pero ese material que distribuye busca mantener esas divisiones de clases, haciendo a la clase alta más culta y letrada y a la clase baja más inculta, porque siendo así, la élite domina a las masas y el sistema económico se mantiene.
Conclusión y propuesta
En este ensayo, traté de demostrar la influencia real de los medios de comunicación en la distribución del capital cultural o bienes simbólicos dependiendo a las diferentes clases sociales y según los dictámenes del poder (contado ellos también como poder).
Es realmente muy difícil modificar esta situación, primero porque si cambia el orden económico, puede variar de manera peligrosa, afectando los intereses del poder, por lo tanto, hay que seguir manteniendo inculta a las clases bajar para poder seguirlas dominando y que mejor herramienta que los mass media. Esto refuerza aún más la tesis de McLuhan “El medio es el mensaje”.
Siendo así, En dónde queda la función educativa de los mass media?. Totalmente parcialidad, al igual que el resto de las funciones y esto es un círculo vicioso de nunca acabar.
Dar una propuesta de solución desde el periodismo cultural es bien tenaz, primero elaborarla y segundo, cómo hacer?, El periodismo depende de los mass media y los mass media no van a dejar que ninguna propuesta de mejoramiento sea puesta en práctica y que afecte sus intereses, por lo tanto, la función de periodismo cultural se limita, o es limitado, a ser sólo una vitrina donde se anuncien eventos o donde se analicen algunos, pero sólo en un lenguaje y contexto que le interese a la clase alta.
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Bibliografía
MOLE, Abraham. Sociodinámica de la Cultura. Ed. Paidos, Argentina, 1978
SIBIRSKY, Saúl. Qué es la Cultura. Ed. Columba, Argentina, 1966
Material fotocopiado dado en la clase de Periodismo Cultural
Apuntes tomando de las charlas sobre diversos tópicos acerca de la cultura en la clase de Periodismo Cultural.
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