Escrito en el 2005. Reflexión a partir del artículo publicado con referencia Cumbre Mundial sobre la Sociedad de la Información realizada en Túnez y realidad colombiana. Periodismo digital desde Colombia.
Internet, creadora de cultura
En torno a este aspecto se han creado dos grandes bloques. Unos argumentan que internet, con la prevalencia (?) del inglés en los contenidos provenientes de países como USA, están barriendo las culturas locales y sobreponiéndose a estas al crear nuevos patrones culturales, es decir, una nueva forma de conquista y colonia.
“La historia de cómo las culturas se conocieron una a otra muestra que el resultado más común fue la matanza; el próximo paso era la conquista y la asimilación. Esto está ocurriendo hoy”, dijo Peter Rantasa, director ejecutivo de la Alianza del Foro para la Cultura Mundial”.
Otros, sustentan que precisamente gracias a la masificación de internet, pueden preservarse patrones culturales autóctonos y más aun, darse a conocer al mundo:
“Queremos utilizar a la sociedad de la información”, dijo el copresidente del encuentro indígena, Kenneth Deer, en una conferencia de prensa el jueves. “Estoy seguro de que muchos de ustedes miraron las viejas películas de vaqueros e indios donde estos últimos eran los malos. Nosotros tenemos que cambiar eso (el estereotipo) y podemos usar las TIC para hacerlo”, afirmó. La comunidad mohawk de Deer, en la oriental provincia canadiense de Québec, ya dio grandes pasos en esa dirección, asumiendo el control del servicio de televisión por cable del gobierno y desarrollando una estación comunitaria para generar sus propios programas. Su histórica radio comunitaria ahora transmite en Internet”.
Ante estas posiciones siempre he sustentado que entre más globalizado es el mundo, más salen a relucir las diferencias locales, es decir, entre mayor globalidad, mayor localidad.
Aplicando el tópico a la pregunta “¿Qué significa esto para la práctica del periodismo en Colombia, en particular, y en Latinoamérica, en general?”, mi respuesta es que internet y restantes TIC brindan la oportunidad al periodista de dar su aporte en la conservación de los patrones culturales propios de sus países, en este caso de Colombia.
Si la comunidad indígena canadiense mohawk pudo gestar la iniciativa de abrirle un dial en internet a su emisora radial comunitaria, en Colombia específicamente, tenemos varios subgrupos indígenas y de negros palenqueros con costumbres propias que pueden darse a conocer al mundo utilizando el mismo camino. Es aquí donde entra a jugar el papel del periodista, como el gestor y asesor de esos procesos.
Ahora, no se trata solamente de dar el paso, sino se saberlo mantener que es lo más importante. Se hace necesario por lo tanto recurrir a la labor mercadotécnica. Entiéndase que no se trata de vender estas costumbres culturales propias, pero si de haya una manera de que el proyecto sea rentable y de para mantenerse así mismo, porque hay que aceptarlo, las TIC sobreviven gracias a que hay fondos para invertir en las mismas.
Un ejemplo rápido. En la sierra Nevada de Santa Marta, existe la comunidad indígena Kogi, un reducto del grupo Tayrona que era uno de los principales grupos indígenas en la Colombia pre-hispánica. Ellos viven en clima frío, cultivan la coca, tienen su propio dialecto, vestiduras, leyes, jefes políticos, etc. Un periodista con un grupo de miembros de la comunidad capacitados en las TIC pueden gestar y asesorar el proyecto de creación de un sitio web sobre esta comunidad: textos, fotografías, videos, audios y conexiones con portales de similar naturaleza locales, nacionales e internacionales y que como aporte económico a este proyecto (la labor mercadotécnica) ellos comercialicen modelos hechos a partir de sus prendas de vestir propias o libros que sean tratados de medicina natural, entre otros.
En conclusión, todo depende de cómo se use la herramienta y en nuestras manos de periodistas preparándose precisamente en el ámbito de las TIC, podemos realizar una labor periodística loable en pro de nuestras propias culturas, sólo se necesita el interés, las ganas de hacerlo y los fondos para gestarlo.
Gracias por la información me ha sido de gran ayuda